

La ciudad fue bautizada, extraoficialmente, como la Capital del Trabajo en la década del 60. A partir de allí se popularizó la denominación, utilizada a menudo en los medios informativos y en el lenguaje electoral, pero nunca hubo una declaración oficial en tal sentido.
Por ello desde el municipio se trabajó con diputados provinciales para elaborar un proyecto de
declaración oficializando la denominación.
El origen de la frase es confuso pero la versión generalizada es que fue acuñada, originalmente
por un periodista misionero al ver el desarrollo que tenía la ciudad en la dácada citada.
Por aquellos años la Cooperativa Agrícola de Eldorado era una de las más importantes, si no la
más, de las cooperativas dedicadas a dicha actividad. El citrus, la yerba y el tung eran los
principales motores de la economía, y casi todo el movimiento comercial se realizaba a través
de la cooperativa.