

Tras cinco días de intensa búsqueda, las autoridades brasileñas encontraron sin vida a Federico Bruni, el turista argentino que había desaparecido en la selva de Sao Bonifacio, en el estado de Santa Catarina. Su cuerpo fue hallado a orillas de un río, donde se sospechaba que pudo haber caído.
Federico Bruni, de 32 años y oriundo de Munro, provincia de Buenos Aires, era un apasionado de la naturaleza y solía viajar a destinos remotos. Aunque había visitado Brasil en otras ocasiones, nunca antes había explorado la zona donde desapareció. Según relataron sus familiares en redes sociales, acostumbraba acampar en áreas selváticas y poblaciones aisladas.
La hermana de Federico Bruni comunicó en sus redes sociales: "La búsqueda terminó. No es el desenlace que esperábamos. Frenen la viralización y por favor dejen de contactar a la Dani. Muchas gracias a todos por la ayuda".
Y agregó: "Siempre juntos hermano. Descansa en paz, te lo mereces. Te amo. Gracias Fede por ser mi hermano. Te amo hoy y siempre. Perdón por no llegar a tiempo. Te amo, te amamos. Siempre juntos".
El joven llegó a Florianópolis en diciembre y se comunicó por última vez con su familia el lunes 27 de enero. En ese contacto, mencionó que pasaría unos días en un camping con escasa señal telefónica. Al principio, sus allegados no se preocuparon por la falta de noticias, atribuyéndola a la falta de conexión. Sin embargo, la preocupación creció cuando la Policía se puso en contacto con ellos.
Durante el operativo de búsqueda, los agentes encontraron la camioneta en la que viajaba, sus pertenencias y a su perra, que permanecía junto a la orilla del río. Finalmente, el hallazgo del cuerpo confirmó el trágico desenlace. Las autoridades investigan las circunstancias de su muerte.